La disposición fue difundida este lunes a través del Boletín Oficial. El propósito es robustecer tanto la formación académica como las capacidades operativas de los soldados.
El Gobierno de la Nación introdujo este lunes cambios en el régimen del Servicio Militar Voluntario, con la finalidad de adaptarlo a las actuales demandas de las Fuerzas Armadas.
La iniciativa, que ya había sido adelantada por el vocero presidencial Manuel Adorni y el titular de la cartera de Defensa, Luis Petri, se formalizó mediante el Decreto 372/2025, divulgado en el Boletín Oficial.
La actualización normativa incorpora condiciones más estrictas para el ingreso, la continuidad y el proceso de formación de los jóvenes de entre 18 y 28 años que se sumen como tropa voluntaria. Uno de los pilares centrales de la reforma es la exigencia de culminar el nivel secundario durante el período de servicio, conforme al artículo 29 de la Ley de Educación Nacional N.º 26.206.
De acuerdo con los fundamentos del decreto, los cambios tienen como meta disponer de soldados “altamente preparados, educados y entrenados”. En ese marco, el Estado se compromete a garantizar no solo la terminación de los estudios secundarios, sino también formación en oficios y otras herramientas útiles para la inserción laboral.
“El Ministerio de Defensa desarrollará un programa educativo orientado a asegurar la finalización del ciclo secundario, el cual será remitido a la Secretaría de Educación para su correspondiente aprobación”, se indica en la norma. Asimismo, se especifica que dicha participación “no deberá interferir con las funciones del servicio militar”.
Para ingresar, será necesario haber terminado la educación primaria, pasar satisfactoriamente una evaluación psicofísica y aprobar un curso de admisión cuya duración se establecerá entre 10 y 12 semanas.
También fue redefinido el procedimiento para el otorgamiento del alta definitiva. Una vez cumplidos los dos años del primer compromiso, la autoridad de cada Fuerza podrá concederla a quienes expresen su intención de continuar, siempre que hayan concluido el secundario y sean evaluados como “aptos para continuar en servicio activo”.
De forma excepcional, se contemplarán hasta dos renovaciones adicionales, también de dos años, cuando se acredite un rendimiento sobresaliente y progresos efectivos en la formación escolar.
El decreto, rubricado por el presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro Luis Petri, determina además que la cantidad de voluntarios a incorporar será definida en función de “las necesidades específicas de cada Fuerza, conforme al Planeamiento de la Defensa Nacional”.
Finalmente, la normativa reitera la función de las Fuerzas Armadas en acciones de apoyo a la comunidad frente a situaciones de emergencia o catástrofes, subrayando que los soldados voluntarios deberán ser instruidos también en esas capacidades específicas.
Esta modificación reemplaza y amplía lo dispuesto por el Decreto N.º 978/95, reglamentario de la Ley N.º 24.429, con el propósito de ajustar el servicio a “los cambios en las prioridades de la Política de Defensa” y al “crecimiento en la necesidad de formación técnica dentro del ámbito castrense”.