Había sido trasladada a principios de julio desde el Ecoparque de Mendoza a un santuario en Mato Grosso, Brasil, donde pasó sus últimos meses. La muerte ocurrió este martes por la mañana y fue confirmada por la organización Proyecto Ele.
Según informaron desde la entidad, la salud de Kenya se deterioraba en los últimos días y el animal recibía atención permanente por parte del equipo veterinario del santuario. Las causas del fallecimiento aún no se encuentran determinadas y este mismo martes se realiza una necropsia, con participación de profesionales universitarios, cuyos resultados se conocerán en las próximas semanas.
Kenya nació en 1981 y llegó al entonces zoológico de Mendoza en 1985, tras un convenio con el Tierpark Hagenbeck de Alemania. Vivió más de 40 años en cautiverio, y su proceso de traslado comenzó en 2017, con un extenso trabajo de entrenamiento, adaptación y controles sanitarios para cumplir con las normativas internacionales. El viaje, de 3.600 kilómetros, se inició el 4 de julio y se realizó en caravana, con su cuidador y dos veterinarios especializados.
Su liberación en Brasil, a los 44 años, marcó el fin de 136 años de cautiverio de elefantes en la Argentina. En el santuario compartió espacio con Pupy, la elefanta proveniente del ex Zoológico de Buenos Aires, que había pasado 32 años encerrada y murió a principios de octubre. Desde Proyecto Ele destacaron que Kenya murió en paz y en contacto con la naturaleza, y subrayaron que su historia simboliza una etapa cerrada en la relación del país con estos animales.


