La imagen de la Virgen de Punta Corral permanecerá en la iglesia de Tumbaya hasta el 16 de mayo. El día 17 iniciará su retorno al santuario enclavado en las montañas.
Durante el próximo fin de semana, la venerada imagen de la Virgen de Punta Corral emprenderá su regreso a su morada habitual. Tras su permanencia en Tumbaya, está todo dispuesto para que este sábado, a partir de las 7 de la mañana, la Mamita del cerro comience su ascenso desde la parroquia local.
El sábado 17 de mayo, la comunidad de Tumbaya será parte de una emotiva ceremonia de despedida, con una misa que será celebrada por el párroco Abraham Pereyra desde las 6 de la mañana. Posteriormente, a las 7 horas, se dará inicio a la tradicional caminata hacia el santuario.
Ceremonia de despedida y partida de la Virgen hacia Punta Corral
El sacerdote Abraham Pereyra, responsable de la parroquia de Tumbaya, informó que la imagen de la Virgen permanecerá en el templo hasta el 16 de mayo.
La jornada del 17 comenzará con un acto religioso de despedida, a cargo del padre Pereyra, programado para las 6 de la mañana. Luego de la celebración, la imagen iniciará su retorno hacia su santuario en Punta Corral, ubicado en lo alto de los cerros. Está previsto que a las 18 horas se realice la misa de bienvenida en el Oratorio de Punta Corral, acompañada por los fieles que participarán en el recorrido.
Se espera una gran concurrencia de devotos y visitantes que se acercarán a la iglesia de Tumbaya para despedir a la Virgen en este momento tan significativo, marcando su regreso al santuario, donde continuará recibiendo muestras de fe y devoción.
El regreso de la Virgen a su santuario es un acontecimiento profundamente arraigado en las tradiciones locales, donde año tras año los pobladores renuevan su compromiso de fe participando de esta emotiva despedida. La jornada será uno de los eventos religiosos más destacados del mes de mayo.
Origen de la devoción a la Virgen de Punta Corral
La historia de veneración a la Virgen de Punta Corral se remonta al siglo XIX, cuando el 22 de julio de 1835, Don Pablo Méndez, un pastor que cuidaba su ganado en las cercanías del Abra de Estancia Vieja, tuvo una aparición. Este episodio marcó el inicio de una devoción que hoy congrega a miles de fieles en cada peregrinación.
Según cuenta la tradición, Méndez vio a una mujer de cabellera resplandeciente que le pidió regresar al día siguiente. Al contar su experiencia en el pueblo, no fue creído, pero al volver al lugar, encontró una piedra blanca con una imagen que recordaba a la Virgen de Copacabana.
Don Pablo llevó la piedra a Tumbaya para presentarla al sacerdote, quien al notar la semejanza con la Virgen de Copacabana, decidió colocarla en la iglesia. Tiempo después, la piedra desapareció misteriosamente. Ante la sospecha, detuvieron a Méndez, pero al inspeccionar nuevamente el sitio de la aparición, encontraron la piedra en el mismo lugar, lo que confirmó su relato y motivó la construcción de una capilla en su honor.
Cada año, miles de fieles recorren distintos senderos para llegar al Santuario de Punta Corral y rendir homenaje a la Virgen. Promesas, agradecimientos y actos de fe movilizan a la comunidad creyente, que mantiene viva esta tradición en honor a la “Mamita del Cerro”.